miércoles, 29 de abril de 2015

La plata coloidal, una vez administrada, no permanece más que unos minutos en la corriente sanguínea, pues es rápidamente absorbida por el sistema retículoendotelial y depositada en las células, particularmente en el hígado y en el bazo y, hasta cierto punto, en los nodos linfáticos. 

Las células retículoendoteliales son parte del sistema inmunológico y combaten a las partículas de plata coloidal como a cualquier materia extraña, consumiéndola. Al ingerir las células tanto las partículas de plata coloidal como los demás gérmenes extraños, ponen a ambos invasores en íntimo contacto, muriendo dichos gérmenes.


Está comprobado que la plata coloidal es tóxica sólo para las células procarióticas y los virus y no para las células humanas (eucarióticas). Las partículas de plata son colectadas por el hígado, excretadas por la vesícula biliar y eliminadas en la orina y las heces, aún en el caso de que dichas partículas hayan entrado al cuerpo por inhalación.

La plata coloidal trabaja a nivel celular, bastan unos pocos minutos desde el contacto con la plata coloidal para que el germen muera. Lo que hace la plata coloidal es inactivar las enzimas que las bacterias, hongos, virus, levaduras y otros microorganismos usan para su metabolismo del oxígeno; es decir, consigue inutilizar el pulmón químico de dichos parásitos y de sus formas pleomórficas o mutantes y eliminarlas incluso en su etapa de huevos. Por ese motivo, al contrario de lo que ocurre con los antibióticos sintéticos, el microorganismo no puede desarrollar mecanismos de resistencia ni ningún tipo de mutación que le permita escapar de la acción germicida de la plata.

Luego las células del sistema retículoendotelial -que es parte del sistema inmune- logran expulsar del cuerpo los gérmenes ya muertos. Por tanto, la plata coloidal funciona como un catalizador ya que su sola presencia hace que muchos microorganismos causantes de enfermedades infecciosas no puedan respirar y mueran asfixiados.
Además, al contrario que los antibióticos sintéticos -que destruyen las enzimas y bacterias benéficas-, la plata coloidal no provoca daño alguno ni a las enzimas ni a ningún otro componente del organismo humano. Y es así porque sólo ataca las enzimas de formas de vida unicelulares que son radicalmente diferentes a las de los organismos pluricelulares. Sin olvidar que dentro del cuerpo humano la plata coloidal no forma compuestos tóxicos ni reacciona con otra cosa que no sea la enzima metabolizadora de oxígeno de un germen unicelular. Por tanto, no puede causar rechazos o alergias de ningún tipo.

Carece de efectos secundarios a las dosis adecuadas y es bastante más asequible que cualquier fármaco y puede ayudarnos tanto a recobrar la salud perdida, como a prevenir numerosas enfermedades infecciosas, pues actúa reforzando y estimulando nuestras defensas.

La plata es un oligoelemento necesario para la especie humana, la deficiencia de plata puede dar lugar a un funcionamiento incorrecto del sistema inmune.

Estos son motivos más que suficientes para que la industria farmacéutica, se sienta amenazada por un producto tan económico, eficaz y fácil de utilizar, al alcance de todos.

En resumen la plata coloidal trabaja a nivel celular, inhabilitando la enzima que muchas formas de bacterias, virus y hongos utilizan para su metabolismo. El efecto es tópico, no sistemático: al contacto, mata o inhibe varios organismos patológicos, agentes infecciosos identificados o no identificados. Por esto mismo, se produce en quien la toma un notorio aumento de energía.


LA SIGUIENTE INFORMACIÓN NO REPRESENTA EN MODO ALGUNO SUSTITUIR EL CONSEJO DE SU MÉDICO DE CABECERA. ANTE CUALQUIER DUDA, CONSULTE A SU MÉDICO.




0 comentarios:

Publicar un comentario

| - |